Page 67 - Levantate Guerrero

66 Parte de la historia de mi vida es el hecho que mi esposo a casa. y yo nos hicimos misioneros. Tomó varios años el Así que, como puedes ver, con este movimiento subimos reunir el apoyo y poder dejar el país para irnos a otro, las 3 escaleras al mismo tiempo. Esto también nos para servir a Dios a tiempo completo. Fuimos probados muestra que la escalera de Dios no siempre esté opuesta en todos los aspectos antes de irnos. Dejamos atrás a la escalera del mundo. Algunas veces son iguales. dinero, extrañábamos a nuestra familia terriblemente y extrañábamos nuestra cultura. Extrañé la comida que preparaba mi abuela, comida que no puedo hacer aquí en México porque no venden los mismos ingredientes. No hay nada fácil en el hecho de ser misionero. Pero nos permitió subir varios escalones en la escalera de Dios. +2 +2 +2 Fue Él quien en primer lugar nos pidió que fuéramos a México. Y en obediencia y a pesar de todo el sacrifcio, subimos un escalón más en la escalera de Dios. Pero Dwight y yo pudimos subir ambos en la escalera del mundo. Dwight había estado trabajando como Ingeniero Aeronáutico para una compañía aérea. Como dejó su Escalera Escalera de la Escalera trabajo y nos mudamos a otro país, le pidieron que del Mundo Comunidad Cristiana de Dios “brinde asesorías”. Ahora sienten que están trayendo un “asesor” importante de otro país para ayudar en sus ¿Te acuerdas que te platiqué de un pastor que tuvo un proyectos, de vez en cuando. Entonces, ante el mundo enredo? Bueno, la verdad es que tuvo el enredo pero se Dwight subió unos escalones más también. arrepintió y la iglesia le restauró a su ministerio. Años después, de la nada, renunció al pastorado, se divorció Mi primer trabajo fue en un restaurante de comida rápida. de su esposa y dejó la iglesia completamente. Yo no sé Trabajé de mesera y después en una pequeña ofcina. qué paso después que tuvo el enredo en un principio, Un año me contrataron como Asistente del Pastor en pero parece ser que bajó más escalones de la escalera la iglesia, y después me ascendieron a Pastora Infantil de Dios que la de la iglesia. Obviamente existía un (sólo que me llamaban “Directora” porque era mujer.) problema con él, porque acabó en el mismo lugar años Así que cuando Dwight y yo nos fuimos de misioneros, después. Sólo que esta vez, él ya no quiso jugar con también subí unos escalones en la escalera del mundo. la política de la iglesia. No sé en qué escalón estaba Al principio era una misionera y el mundo no reconoce de la escalera de Dios, aunque claro que bajó algunos eso como algo importante. Pero pronto comencé a dar escalones. A Dios no le va a parecer gracioso el hecho conferencias y a escribir lecciones. Ahora, de pronto, yo que tengas una segunda aventura y te divorcies de tu era una escritora y conferencista y eso te hace subir en esposa. Porque cuando se llega al punto de que alguien se la escalera del mundo. divorcia, parece que ambos lados pelean para mantener Claro que también Dwight y yo subimos en la Escalera de su posición en la comunidad; así que es difícil ve dónde la comunidad cristiana cuando nos hicimos misioneros. verdaderamente está el corazón de las personas. Ahora estamos en un nivel pastoral, y nuestra iglesia Afortunadamente, no somos responsables de impartir nos permite predicar cuando regresamos de vacaciones justicia. Podemos confar en que Dios conoce donde están los corazones y que algún día, Él traerá a cada Así que, debemos persona ante su justicia divina. esforzarnos para poder Mencioné anteriormente, hay muchas escaleras que subir. Está la escalera del mundo, la Escalera de la ver la escalera de Dios comunidad cristiana y también la escalera de Dios. Si tú quieres convertirte en un general de 5 estrellas y enfocarnos en subir en el Ejército de Dios, no debes estar en la escalera equivocada. Así que, debemos esforzarnos para poder por ella y por encima de ver la escalera de Dios y enfocarnos en subir por ella y por encima de las otras 2 escaleras. Esto toma práctica las otras 2 escaleras. y entrenamiento. No hay otra forma de ver aquello que normalmente es invisible.